Hoy Soy Benedicto XVI


Estos días, en que se habla del enésimo escándalo de abusos sexuales a menores protagonizados por sacerdotes irlandeses y ocultados intencionadamente por mis antecesores durante décadas, me he propuesto extender una cortina de humo para minimizar su impacto y desviar la atención de los medios hacia noticias de calado mucho más frívolo. En religión, como en política, si no puedes resolver un problema, crea otro.
Por esta razón hemos decidido publicar en el Diario del Vaticano nuestro Top Ten particular de la mejor música de todos los tiempos: un compendio con los diez temas que cualquier buen cristiano debería tener en su ipod. Una divina clasificación encabezada por el álbum Revolver (1966) de The Beatles, a la que siguen otras joyas del rock atemporal como el fascinante The dark side of the moon (1974) de Pink Floyd, Rumours ( 1977) de Fleetwood Mac o Graceland (1986) de Paul Simon, por citar sólo algunos.
Un rápido repaso a este particular billboard católico permite extraer dos conclusiones, no por obvias poco interesantes. Uno. Todos los temas fueron compuesto el pasado siglo XX, lo que pone de manifiesto algo de sobra conocido: la Iglesia sigue anclada en la prehistoria, hasta en asuntos musicales. Dos. No aparece una sola referencia a los Rolling Stones (Aftermath) o a The Clash (London Calling) ¿Por qué? Pues porque son demasiado rojos. Lo que vienen a demostrar otra realidad incuestionable: las corrientes progresistas no tienen cabida en nuestro organigrama de poder.
Pero volvamos por un instante al asunto de la pederastia. Me pregunto, con intachable fervor religioso, qué escucharían los sacerdotes irlandeses mientras violaban a centenares de púberes bajo el tácito consentimiento de una gran parte de la estructura eclesiástica. Supongo que, por barrer hacia casa, se decantarían por el Achtung Baby (1991) de U2, a los que hemos situado en octavo puesto de nuestro particular Top cristiano. Me los puedo imaginar, bajándoles los pantalones mientras escuchan de fondo la voz de Bono. Y luego, esos mismos párrocos pederastas, tras haber abusado con saña de los asustadizos niños, elevando el volumen del radiocasete donde suena el inconfundible Thriller (1982) de Michael Jackson, sexto en nuestra lista. Terrorífico.

Comentarios

  1. Este tema me pone enferma, cuanto oscurantismo, que poca luz hay sobre el tema, cuanto silencio.. repugnante y cómplice, y lo del marcial maciel....????!!! aggggggggggggg que asco!!!.

    ResponderEliminar
  2. Tienes razón. Sin embargo, necesito escribir sobre esto...como un imán que me lleva a esta maldad incomprensible
    Mañana jueves trataré de aportar algo de luz y alegría.

    ResponderEliminar
  3. Me han dicho los del ciberpais que les gustó mucho tu blog, lo proximo será una candidatura al "ortega y gasset", ja,ja, ja, en serio. Tienes talento.
    Cuanta gente con talento oculta...verdad??.
    PEnsé que serias esta semana Alex de la iglesia, o Pedrito almovodar, gracias por no serlo, que hartazgo!!

    ResponderEliminar
  4. Este tema me crea zozozobra y angustia, es terrible la actitud de la iglesia frente a la multitud de casos que hay a lo largo y ancho del mundo, como católico que soy me entristece este tema y me repugna,imperdonable no incluir a "the clahs"

    ResponderEliminar
  5. Sí, ser Pedro hubiera sido demasiado...evidente. El lunes y martes estuve fuera del mundo y no pude (quise) escribir...no disponía ni de ordenador...no vi ni los Goya ni me enteré voluntariamente de lo que pasaba en el mundo.

    ResponderEliminar
  6. que suerte!!!!, y que viste fuera del mundo??? hay vida??

    ResponderEliminar
  7. La hay. Sustituye los 1 y los 0, por colores. Ya ves, lo que son las cosas....

    ResponderEliminar
  8. creo que conozco ese planeta...las notas musicales son colores tambien???

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares